El tema de las inundaciones es complejo, ya que no responde únicamente a la presencia de eventos extremos —que son cada vez más frecuentes e intensos—, sino a factores como la falta de planificación urbana, asentamientos informales, cambio en el uso del suelo, reducción de los espacios verdes dentro de la ciudad, invasión del cauce de los ríos, ausencia de infraestructura para el adecuado manejo de las aguas de escorrentía y planes de mantenimiento insuficientes o inexistentes, entre muchos otros.
En la Jornada Técnica CFIA-COLPER sobre “Inundaciones, atención de infraestructura y el rol de las municipalidades”, el Ing. Rafael Murillo M., realizó el diagnóstico y planteó algunas acciones por desarrollar para mitigar los efectos de esta problemática. Las propuestas de los expertos se conocieron en el panel integrado por la Sra. Dyanne Marenco G., Presidenta de la Cruz Roja Costarricense; el Arq. Huberth Méndez H., Subgerente de Provisión de Servicios de la Municipalidad de San José; el Ing. Rafael Oreamuno V., Experto CFIA y el Sr. Eladio Solano L., Jefe de Pronósticos del Instituto
Meteorológico Nacional (IMN). La periodista María Sui L. fue la encargada de moderar el panel.

diagnóstico de la problemática.
Recomendaciones para prevenir y mitigar los impactos de las inundaciones:
Costa Rica debe incorporar la gestión integral de las cuencas hidrográficas, aplicando políticas de prevención de inundaciones a través de la planificación territorial, respetar las zonas de protección de los ríos y delimitar las zonas inundables, es decir, es necesario analizar el problema desde su raíz, y evitar pensar en soluciones puntuales para la zona o sector donde el riesgo se manifiesta
Es necesario examinar los alcantarillados pluviales de los diferentes cantones del país, identificando su capacidad y condiciones para determinar las necesidades de las comunidades y planificar la sustitución en caso de que la demanda o su estado lo amerite. De igual manera debe establecerse el caudal que pueden recibir los cuerpos receptores.
Para mejorar la infiltración de agua, la ciudad debería irse transformando a lo que se llama “ciudad esponja”, utilizando material permeable en los suelos, permitiendo además la recarga de acuíferos.
La incorporación de proyecciones climáticas futuras a través del uso de modelos que muestren las tendencias en los parámetros climáticos ayudará a generar resiliencia en las ciudades de manera proactiva, y no reactiva.
Debe incorporarse soluciones basadas en la naturaleza (SbN), que implica “volver hacia las raíces”, donde se restauran los ecosistemas y se devuelve al entorno espacios verdes y azules que existían antes de ser removidos para construir elementos grises.
Es necesario habilitar Sistemas de Alerta Temprana (SAT) que permitan vigilar, prevenir y pronosticar amenazas, apoyando los procesos de planificación de comunicación y preparación que permitirán a las personas, las comunidades, los gobiernos, las empresas y otras partes
interesadas adoptar las medidas oportunas para gestionar el riesgo con antelación.
Es necesario que el Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA) actualice los códigos de diseño y construcción de acueductos y alcantarillados, para que respondan a las condiciones actuales.
Debe brindarse un mantenimiento adecuado y oportuno al sistema de manejo de escorrentía urbana.
La ciudadanía debe ser educada sobre el buen uso de la infraestructura pública, conociendo el efecto que se genera al depositar desechos sólidos en el alcantarillado pluvial.
Puede ver la Jornada Técnica haciendo clic aquí.