Ing. Efraín Menjivar P.
Miembro CIT
A lo largo de los años, como ha sido normal en la historia, la profesión de la topografía ha enfrentado distintos panoramas, ante los cuales nosotros, como profesionales en Topografía, hemos tenido que adaptarnos, aprender y/o mejorar, lo cual ha creado un ámbito profesional cada vez más complejo, completo, interdisciplinario, y desafiante, en el cual desarrollamos nuestras tareas diarias.
Un cambio fundamental ha sido la incorporación de la tecnología, la cual ha venido a facilitarnos, en cierto modo, la manera de extraer nuestros datos, procesarlos, e incluso, presentarlos en el proyecto que estemos trabajando, ya sea en obras civiles, enseñanza, sistemas de información geográfica, o planos de agrimensura, entre otras tareas.
Contar con la disposición y capacidad de aprender constituye un pilar fundamental para lograr la adaptación al proceso de cambio, y nosotros, como profesionales, debemos asimilar las transformaciones tecnológicas en constante modernización. Esto lo hemos experimentado en nuestra historia profesional, personal, y en el recorrido de la humanidad a lo largo de los años; ejemplo de ello son los aprendizajes y ajustes realizados al utilizar un equipo nuevo, al emplear nuevos conceptos, o al asimilar metodologías innovadoras; todo en pro de obtener los resultados óptimos, según sea el ámbito de aplicación.
Incluso, dentro de nuestro gremio, ha surgido una variedad de especializaciones, cada una de las cuales se ajusta a un desempeño laboral específico. A continuación, se indican los diferentes ámbitos de actuación profesional.
En el ámbito académico
Quizá el primer contacto que tenemos con la profesión ocurre en las universidades, cuyo reto es retribuir a la sociedad personas íntegras, éticas y provistas de los conocimientos necesarios para enfrentar el ejercicio profesional.
Las casas de enseñanza deben velar, continuamente, por mantener un estándar de calidad alto, mediante la colaboración de un cuerpo de profesores comprometidos con poseer y ofrecer una capacitación académica y técnica eficiente y continua.
El objetivo de la educación en el ámbito de la Topografía es crear profesionales provistos de un pensamiento crítico, y la habilidad para resolver problemas aplicando las teorías y técnicas aprendidas. En los programas de estudio universitarios es fundamental incluir, además de los elementos constitutivos de nuestra profesión, campos específicos como la Geodesia, la Obra Civil, los Avalúos, y el Catastro.
En el ámbito catastral
Un reto importante para los topógrafos radica en la continua aplicación de nuevas normativas a nivel nacional, además, de ofrecer la seguridad jurídica eficiente sobre los bienes inmuebles del Estado; esto debe ejecutarse mediante la aplicación de las leyes y reglamentos existentes.
También, es labor del profesional en Topografía el mantenimiento de los insumos catastrales necesarios para la calificación y análisis de planos catastrados, con el objetivo de ofrecer un producto de óptima calidad, en cuanto a los requerimientos técnicos, los cuales deben ser actualizados, según las disposiciones nacionales, y estar disponibles para todos los usuarios nacionales y extranjeros, en los sistemas informáticos existentes.
A mediano plazo, en nuestro panorama profesional, se espera contar con la finalización de la obra catastral, el levantamiento catastral, así como la depuración y el establecimiento de los distritos que aún no cuentan con tal información.
Asimismo, una tarea primordial es condensar toda la información, la metodología y la normativa que cumplan con los estándares nacionales e internacionales, aplicados a nuevas tecnologías. Para ello, se deben respetar los requerimientos técnicos que la Ingeniería nos brinda, y el empleo de un sistema (incluida la tecnología y los procesos) óptimo para la inscripción, el mantenimiento y la publicidad de la información que se genera día a día, como producto del mercado inmobiliario. Además, esto debe avanzar de la mano con el desarrollo del país en zonas rurales, urbanas, y en áreas bajo regímenes especiales, como la Zona Marítimo Terrestre, las franjas fronterizas, las áreas protegidas, y otras que forman parte de la realidad geográfica nacional.
En el ámbito profesional
Al ser profesionales integrales e interdisciplinarios, debemos mantenernos en constate capacitación, no solamente respecto de nuevos conceptos y equipos de nuestra rama profesional, sino también de otros que debemos utilizar. El objetivo es ser profesionales cada vez más completos y concentrados en las labores realizadas, capaces de dar generar soluciones en nuestra área, y guiar, proponer y satisfacer las necesidades de los clientes, en los temas que surjan.
De la misma forma, hay que establecer un balance entre las capacitaciones técnicas y la normativa, las cuales nos brindan las pautas por seguir para la aplicación de nuestra profesión. Sabemos que, constantemente, la normas son sometidas a modificaciones, ante las cuales debemos contar con la capacidad de responder, según sea el caso.
Como profesionales, es sumamente importante conservar nuestra integridad en conocimientos y actitudes. Debemos mantener un alto nivel ético en todo trabajo por realizar, puesto que no podemos desligar nuestra profesión de las ciencias exactas; por ello, debemos basar nuestro criterio en fundamentos teóricos y técnicos, a fin de conservar la ética profesional en todo momento; de esta forma podremos posicionarnos, con toda la extensión de la palabra, como profesionales.
En el ámbito tecnológico
Por otra parte, aunado al desarrollo de la tecnología para la aplicación de soluciones de topografía, se encuentra el gran reto de actualizarnos constantemente respecto de las diferentes herramientas, tales como equipos, sensores remotos, InSar, y Lidar, entre otros, los cuales facilitan nuestro trabajo, pero que, a la vez, nos retan a manejar la información que generan. Es obvio que de nada nos sirven todos los datos recolectados, si no sabemos cómo hicimos el trabajo, ni cómo debemos procesarlo y presentarlo, según nuestros requerimientos, ya sea para la publicación en algún portal, la generación de mapas, las estadísticas, o para algún otro producto derivado. El desarrollo tecnológico no se puede apartar del desarrollo de nuevas habilidades en el uso de softwares, hardware y otras herramientas que permiten el procesamiento de datos.
Anteriormente, se mencionó que la presentación de la información, mediante portales web, aplicaciones y demás, se ha vuelto fundamental para generar un resultado final. Es inútil recolectar información, si se desconoce cómo presentarla, ya que ésta debe ser amigable para quienes deben interpretarla, según sea su objetivo final; puede ser la definición de un proyecto, la toma de decisiones sobre algún desarrollo inmobiliario, el movimiento de tierras, los requerimientos técnicos para obra civil, los materiales, u otros requerimientos.
En el ámbito geodésico
La Geodesia, como base de los proyectos y referencia para todo trabajo topográfico, es trascendental para cualquier labor que se inicie, ya sea un sistema de referencia local o nacional, según lo que se requiera.
El mantenimiento y la actualización de nuestro sistema de referencia representan el gran reto para los próximos años. Anteriormente, mediante el decreto ejecutivo 33797-MOPT (2007), se nos incorporaron conceptos nuevos, como el sistema CR05, y la proyección CRTM05; por tanto, debimos cambiar la mentalidad hacia un sistema unificado, con puntos de referencia pasivos, el cual cuenta con un ámbito de aplicación nacional para todo trabajo. Más adelante, sólo habían transcurrido un poco más de diez años, cuando se emitió el decreto 40962-MJP, de 2018, en el cual se actualizó el sistema CR; éste incluía particularidad técnicas específicas, y agregaba una variable interesante: un sistema dinámico; la consecuencia ha sido que, actualmente, no podemos referirnos a una posición a nivel espacial, en sus tres dimensiones, sino que también debemos agregar la variable de tiempo, la cual varía considerablemente, según nuestro ámbito profesional.
Conceptos como ITRF, sistema, proyección, parámetros de transformación, y épocas, se han venido evidenciando cada vez más en el ámbito profesional; ello es parte del conocimiento profesional, y es nuestra obligación conocer sobre eso, y su impacto en nuestro quehacer.
Todos estos cambios y normativas generados, principalmente, por el ente rector de la geodesia a nivel nacional; es decir, el Instituto Geográfico Nacional, permiten desenvolvernos una mayor cantidad de herramientas para afrontar los proyectos que se presenten. Un ejemplo reciente de ello es el mantenimiento de una red de estaciones de medición continua, cuya cobertura nacional permite mediciones en NTRIP y, desde hace años, posibilita la descarga de datos para su procesamiento. Desde hace aproximadamente 13 años, esta red debe responder a las necesidades técnicas de todos sus usuarios en los niveles nacional e internacional; asimismo, se mantiene en constante mejoramiento, con altos estándares en cuanto a la calidad de la información generada diariamente.
En resumen, los retos que afrontamos los topógrafos, como gremio profesional, deben asumirse como una evolución propia y personal, generada por la adquisición de nuevos conocimientos aplicados mediante nuevas tecnologías; su aplicación en nuestro quehacer diario es la única forma en la que podemos, en conjunto, como colegio profesional, mantenernos y posicionarnos cada día a la vanguardia del país, e incluso de la región.