Junta Directiva del CACR
Las grandes enfermedades de la humanidad y los avances en el diseño de las ciudades mediante la arquitectura y urbanismo han ido histórica y necesariamente de la mano.
Hoy, la humanidad se enfrenta una situación de grandes consecuencias y es posible afirmar que no será la primera vez que el mundo cambie después de una pandemia, en este caso, la covid-19.
La situación de la pandemia potenció nuevas tecnologías y formatos como el teletrabajo, generadores de aspectos que van afectar el rediseño de los espacios laborales, lugares abiertos, ventilados, climatización distinta, cambios sustentables y sostenibles que definieron, desde hace un tiempo, la forma de convivencia sobre la que se han ido diseñando los espacios.
La vivienda podría evolucionar a medio plazo hacia entornos más cómodos que demandarán un espacio para los nuevos tiempos.
Así como comenzamos a hablar de arquitectura post-coronavirus, en su momento, la arquitecta Beatriz Colomina, en su libro “Arquitectura y Rayos X”, demostró cómo la tuberculosis modificó la forma en que se hacía arquitectura, a partir del aumento de medidas de higiene, ventilación y paredes blancas, por ejemplo.
La cultura arquitectónica de convivencia de los espacios públicos, por culpa de la covid-19, tiene que reinventarse y atraer nuevas soluciones especiales con nuestras nuevas realidades, como el cambio de materiales, cuyos componentes deben visualizarse para no propagar ni multiplicar el virus.
Uno de los sectores más golpeados universalmente por la pandemia, el turismo, necesariamente urgirá una profunda reflexión sobre las nuevas necesidades de sus espacios comunes y privados: el hospedaje turístico, para superar el temido contagio, necesita hoy más que nunca la fusión entre arquitectura y nuevas necesidades, por ejemplo, para engendrar un neoconvivir con el 1,8 m de distancia como fundamento.
“Dentro del nuevo orden de coacción social los pequeños centros que van a surgir de forma natural en los barrios que se habían perdido por los centros comerciales», agregó Mario Morales EY.
La covid-19 genera un nuevo reto arquitectónico. De ahora en adelante la reflexión hacia el futuro va de la mano con una nueva forma de relacionarnos y convivir, promoviendo espacios, pero consolidando límites. Eso significa modificar la forma de ver la realidad.
Hay que repensar conceptos como interior y exterior, porque nos llegó el momento de vivir, crear y experimentar, como lo hicieron otros grandes profesionales en arquitectura, empujados por la salud pública ante monstruos tan enormes como la tuberculosis, la peste negra o el VIH… ¡La arquitectura tiene la palabra!
Excelente artículo!
Para nadie es un secreto que la pandemia global del Covid-19 ha generado un fuerte debate en el sector de la arquitectura, y que ahora es el momento de empezar a idear el futuro y tomar cartas en el asunto.